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El Leviatán

  
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Escritor: Joseph Roth

Hasta ahora, me encontraba entre los que relacionaba el nombre de el Leviatán con la imagen de lo demoníaco, sin embargo, en este breve relato de apenas 40 páginas, el Leviatán al que se refiere Roth es otra cosa. Se refiere a una especie de dios marino creado por Yavhé, y que serpentea en las profundas aguas "primitivas" para cuidar a las valiosas criaturas que allí habitan. Entre estas bellas criaturas se encuentran los corales.

Este relato nos describe con una exquisita escritura una especie de parábola. En ella aparece un judío de 45 años de los no-asimilados que vive en una pequeñita ciudad de Rusia de principios de siglo XX. 
Allí como muchos de los suyos llevaba una vida ordenada, tranquila y apacible entre rezos y un trabajo que alimentaba su espíritu, porque es que este individuo era un comerciante muy especial. 
Comerciaba con los corales, que eran para él más que mera mercancía. Para él eran como le sucediera al Leviatán de aguas profundas, unas amadas criaturitas que él encontraba nacidas para ser las bellas joyas que traerían buenos augurios a aquellos que se los compraban.
Era por esta razón el comerciante Nissen Piczenik, un hombre muy querido en su comunidad.

¡Pero! este Nissen Piczenik, como si fuese el Leviatán de Yavhé, es decir, ese "animal precioso y raro, acostumbrado a vivir en el fondo del mar, sube a la superficie, por razones desconocidas",  ¡"Eran las primeras vacaciones en la vida de Nissen Piczenik"! y en esta contemplación de lo que existe en la superficie, alejado de las corrientes profundas del océano, es tentado por las nuevas corrientes de la modernidad que traen nuevos materiales y promesas de rentabilidad que hará que el comerciante de corales se traicione a sí mismo y a sus preciosos corales vivos, al mezclarlos con corales falsos mucho más baratos de conseguir y por tanto,  rentables. El resplandor y facilidad de lo artificial va a poder, por un tiempo,  con nuestro comerciante, y ya nada volverá a ser lo mismo, ni para él ni para su comunidad ...



NOTAS PERSONALES:

  1. Me ha parecido entender en esta especie de parábola,  que el mar profundo y primitivo donde habita el Leviatán, podría significar el trabajo que se contempla como una actividad creadora que no traiciona la naturaleza profunda del que lo efectúa, en el sentido de que el trabajo no tiene como único objeto la obtención de la ganancia, sino también la obtención de una satisfacción acorde a la naturaleza del individuo, siendo la ganancia una consecuencia del trabajo bien hecho, pero no un fin en sí mismo.
    Es muy bonito cómo describe esto el escritor. Describe a un comerciante de corales, en el que incluso su físico y pelo pelirrojo recuerda a una de estas algas marinas, y cuya lugar de trabajo tanto recordaba al fondo del mar donde se encuentran los corales, y por el que siente la nostalgia del que ama el mundo de donde proceden.
  2. Cuando el comerciante sale a la superficie de este bello mundo interior que es descrito, es como si el Leviatán saliera y se olvidara de sus corales y los traicionara al dejarse tentar por el demonio que pudieran ser los nuevos tiempos con su técnica y nuevos materiales que imitan de forma artificial a los corales. Es el triunfo de lo fácil, ya no hay que ir al fondo del mar a coger los corales. Es el triunfo de lo inauténtico. Ahora, el amor por el trabajo desaparece, y sólo queda la ganancia esperada. Un mundo nuevo moderno que se mueve en lo superficial y que todo lo corrompe. Y como el mundo de las aguas profundas ya no interesa a nadie, porque la vida ya no depende de ellas, porque a nadie interesaba ya, ni deseaba que siguiera con vida, por eso también ese mundo viejo moriría.
  3. Todo este mundo moderno que asalta el mundo que ya aparece como algo viejo destinado a desaparecer, es algo que he visto en otras novelas de Joseph Roth. En una de sus novelas “La cripta de los capuchinos”, por ejemplo, ya hablaba del cambio estético de la sociedad, allí se decía … “esas cosas horribles hechas ahora con materiales sin valor” porque “mal está cuando se engaña, pero hacer del engaño un mérito ….”
  4. El alcohol, como no puede ser de otra forma, también se encuentra muy presente, jajaja tanto cuando el comerciante de corales era fiel a sí mismo y a sus corales, como cuando no. En el primer caso porque …. no puede haber “auténtica compra sin un trago” con el que obsequiar a sus visitantes compradores; y en el segundo caso, se entiende que para sobrellevar la triste situación, los grados también necesitan que se les haga su hueco.
  5. La elección del celuloide como material falso con el que hacer corales no parece que fuera accidental. Roth despreciaba el cine. Encontraba que las películas eran el auténtico anticristo. De hecho decía que las tres H del diablo eran: Haman, Hollywood y Hitler. Lo cierto es que fueron años en que muchos escritores sobrevivieron gracias a su colaboración con el cine.
  6. SPOILER: muy bonito el final. El último viaje de este comerciante en un barco que naufraga, y así el comerciante de corales "volvió a casa con sus corales, en el fondo del océano, donde se retuerce el poderoso Leviatán. Descanse allí en paz junto al Leviatán hasta la venida del Mesías".
    Este final me ha parecido más que una caída definitiva e inevitable del personaje en su deterioro, una forma de volver a lo que antes fuera, antes de dejarse arrastrar por la superficialidad de los tiempos modernos, aunque la única forma de hacerlo fuera abandonar esta vida a la que no quiere pertenecer, la modernidad que engulle lo antiguo, y que en su avance ya no da valor a lo que en realidad seguía teniendo valor para él y que, sin embargo, es algo muerto para el resto.
  7. El Leviatán, es un relato que iba a formar parte de una serie de relatos que en su conjunto iba a titularse "los falsos corales". Se publicó en 1940, aunque parece que al final solo quedó este relato.
  8. La pequeña ciudad de Rusia de este relato es Progrody, ignoro si existe fuera de la historia. Aunque el escritor es de Brody, una ciudad que tras el desmembramiento del imperio austro-húngaro también llegaría a ser rusa (aunque hoy es Ucrania). Se parecen los nombres, ¿o no?.


16 comentarios:

  1. Como bien te podrás imaginar, al terminar la lectura de la reseña, al primer lugar que han ido mis ojos ha sido a esa palabra en mayúsculas y ROJO que nunca debería ni mirar pero que no puedo evitar leer jajajaj Veo que regresas a Joseph Roth una y otra vez. Finalmente tendré que ver que es lo que tanto te atrae de este autor que te va dejando su poso lectura a lectura, igual hoy ya ni duermo por la necesidad de leerle jejejej En cualquier caso este hombre escribía en momentos de importantes cambios en el mundo, así que seguro que aportará cosas curiosas desde su propia visión. Al final más que la anotación de un libro debo llevarme al autor, aunque solo sea para ver que te tiene atada a él jajaja

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    1. Pues Susana,
      Tiene personalidad, y está bien leer sobre su época con una persona de la época con criterio, aunque uno no necesariamente tenga que pensar lo mismo. Refleja muy bien la desaparición de un mundo que desparece. Parece que su novela "La marcha Radetsky" es de lo mejorcito que tiene. Yo no lo he leído. Si te apetece te espero y así lo pruebas. No temgo prisa. Sus novelas son siempre fáciles de leer, y él escribe demasiado bien.

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    2. Por cierto, veo que te puede la curiosidad y ¡el peligro! Jajaja

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    3. Me puede, me puede!!! :D
      Pues sería una buena opción para leer contigo, Claro!

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    4. Pues lo hacemos, jajaja.
      Vamos a darnos tiempo para quitarnos lo pendiente y ¡vamos! ... a ver qué pasa, jeje :P

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  2. Me pasa como a Susana, que por todo lo que nos cuentas de este autor, ya me siento tentada por cualquier escrito suyo. Tendré que investigar en la biblioteca. Y ver si los pendientes de mi estantería aceptan que lo cuele...
    Besotes!!!

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    1. Margarí,
      Este escritor tiene muchos relatos y novelas cortas. Es fácil probarlo. Yo empecé con "El triunfo de la belleza" y me quedé sorprendida de lo mucho de desprecio que había hacia la mujer, aunque creo entender qué parte le hacía pensar así, y eché de menos que no comprendiera el por què de que pasara eso. Pero bueno, no me enrollo, en cualquier caso, a pesar de que no era mi libro, le reconocí la forma de escribir casi única y una forma de pensamiento también muy libre. Así que ya no puedo más que ir picando poco a poco todo lo que nos dejó.

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  3. Oy, se me ha borrado el mensaje, a ver si me acuerdo de todo. Te decía que es un libro que llevo mucho tiempo queriendo leer porque toca parte de mi cultura y el escritor un exponente importante de ella. No sé por qué no lo he hecho aún.

    Por otra parte, y te contesto aquí para asegurarme de que lo lees, la ley del Kanun de libro de Kadaré sigue estando en vigencia aunque más en la mentalidad del pueblo que en la vida práctica. Ley del huésped y ley de la sangre. Del último se han dado casos esporádicos, como te digo, en años recientes, suscitando el interés público. Hasta salió una serie de comics, espero que lo puedas ver, sorprende la imagen tan actual, es casi manga, a ver si puedes abrir esto.... http://www.t411.io/torrents/albanie-la-loi-du-kanun-intgrale-3-tomes

    Un beso :)

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    1. Yossi,
      Ya lo he intentado, pero me pide registros, o números de teléfono. Da igual. Me has dejado más que satisfecha. Así que si tú te anotas a Roth como escritor (que seguro que te gusta), yo me apunto a Ismael Kadaré como escritor (que seguro que me gusta también, jajaja). La desgracia es poder dejarles hueco. Pero lo tengo más que en cuenta y no creo que tarde mucho. Sería la primera vez que leyera algo de un escritor de origen albanés, y apetece. Pronto.

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    2. Es una novela cortita y muy representativa de la realidad albanesa. Tammbién te recomiendo El palacio de los sueños, una especie de distopia socialista, ya publicaré la reseña :)

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    3. ¡Qué despiste! Venía a dejarte esto http://internacional.elpais.com/internacional/2012/10/19/actualidad/1350669077_773761.html pero léelo un poco en diagonal antes de lanzarte con la novela, es bueno no arruinar el factor sorpresa :)

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    4. Gracias Yossi, lo acabo de leer. Me recuerda un poco a las leyes gitanas, es como si gitanos y albaneses compartieran orígenes comunes en sus tradiciones. Para ellos la justicia de los tribunales es como un adorno inútil que no funciona, jajaja. No parece que estén aún para incluirlos en la Union Europea. ¿Y serán así todos los albaneses o serán unos códigos que se mantienen en determinada clases sociales del país? Hay otra cosa del artículo que me ha llamando la atención por un aún-peor, y es cuando algunos se quejaban que estas leyes de sangre se estaban aplicando como quieren, a su propio interés, sin recurrir a la tradición que pudiera tener la ley, se podría decir, sin recurrir a lo que pudiera tener de honor, como un ni-carne-ni-pescado, jajaja.
      En fin, Yossi, gracias otra vez. Picaré con Kadaré seguro. En una no-reseña mía resulta que me voy con un libro de otro, jajaja

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  4. yo creía que el leviatán era un demonio...o algo así. Me anoto a Roth. Despierta en tí tan interesantes reflexiones que no hay que dejarlo pasar.
    Un beso,
    Ale.

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    1. Ale,
      Es que este escritor es muy bueno para cuando te interesemos, jajaja. Aquí estamos los europeos tan lejos de tus tierras mexicanas buscando escritores testigos y observadores de un mundo de cambios.

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  5. Estoy prendado de este libro por su título. A ver si me animo con el.
    Saludos!

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    1. El lector invisible,
      ¡40 páginas! En este caso salir de dudas no requiere mucha inversión de tiempo, jeje

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