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Escritor: Benito Pérez Galdós.
(Segundo Episodio
Nacional)
En el episodio anterior, Gabriel nos
contó el desastre sucedido a nuestra flota naval en 1805, y es que
él iba embarcado en el mismísimo Santísima Trinidad para
contárnoslo.
En éste nos vamos a 1807. Cosas de gravedad están por pasar, “por las calles las personas se paraban preguntándose noticias, y regalándose mutuamente las mentiras de que cada cual era forjador o inocente vehículo”.
En éste nos vamos a 1807. Cosas de gravedad están por pasar, “por las calles las personas se paraban preguntándose noticias, y regalándose mutuamente las mentiras de que cada cual era forjador o inocente vehículo”.
Gabriel es ya todo un adolescente. Casi 17 años tiene. Sigue siendo un criado, sí, pero ahora contratado por una actriz de los teatros de las que se codea con la corte, porque “aquellos nobles buscaban la compañía del pueblo para disfrutar pasajeramente de alguna libertad en las costumbres, aunque sin saberlo, estaban consumando la revolución que tanto temían, pues ya estaban echando las bases de la futura igualdad”.
En estas bajadas de la corte a clases
más bajas, los artistas fueron los escogidos, y ¡claro! como el
Teatro es cosa de artistas, pues va a ser una de las razones por las
que esté tan presente en este episodio.
Teatro y Corte, ambos con sus conspiraciones, y si en la Corte se acaba con una conspiración de palacio: La conspiración de El Escorial de 1807, que es el objetivo central de este episodio y que tan bien nos va a poner al día Gabriel; Con el Teatro nos relajamos y sorprendemos a partes iguales, porque una tragedia en la que casi no se distingue representación de realidad va a ser descrita. Lágrimas de emoción escaparán al público, ¡qué realismo! suspiran, y es que Galdós para amenizar introduce en la trama amores desatados de celos pasionales, envidias, intrigas... y un Gabrielillo, que a la vez que nos narra lo que está pasando, va madurando para nuestro disfrute y como seguro seguiremos disfrutando de esa evolución en episodios siguientes.
Teatro y Corte, ambos con sus conspiraciones, y si en la Corte se acaba con una conspiración de palacio: La conspiración de El Escorial de 1807, que es el objetivo central de este episodio y que tan bien nos va a poner al día Gabriel; Con el Teatro nos relajamos y sorprendemos a partes iguales, porque una tragedia en la que casi no se distingue representación de realidad va a ser descrita. Lágrimas de emoción escaparán al público, ¡qué realismo! suspiran, y es que Galdós para amenizar introduce en la trama amores desatados de celos pasionales, envidias, intrigas... y un Gabrielillo, que a la vez que nos narra lo que está pasando, va madurando para nuestro disfrute y como seguro seguiremos disfrutando de esa evolución en episodios siguientes.
Sabemos que aquella conspiración resultó
ser un fracaso, y esto no es un spóiler, porque ya los libros de Historia se
encargan de hacerlo, aunque ya digo que nuestro Gabrielillo lo va a explicar
mucho mejor, rodeado de todos esos personajes que tal y como se dice en la novela muy ingeniosamente son "prueba de la inmensa variedad que el Creador ha puesto en la fauna moral, así como en la física".
NOTAS:
- Se habla del boom que supuso el estreno de “El sí de las niñas” de Moratín, que se estrenó en 1806, y dice Galdós sobre las reacciones: “Los enemigos en letras que eran muchos, y los envidiosos, que eran más”, pero añade “El justiciero pueblo que nos rodeaba, y que en su buen instinto artístico comprendía el mérito de la obra, protestó contra nuestra indigna cruzada” (de desprestigio).
- En aquellos tiempos reinaban Carlos IV y María Luisa de Parma. Se dice que el poderoso primer minsitro Godoy estaba allí más que por valía personal, por los favores de la reina. El libro nos cuenta, que la figura de Godoy no era querida por ninguno de los sectores de la sociedad, y sin embargo el príncipe heredero Fernando (VII), contaba con los apoyos de casi todos los sectores de la sociedad. La conspiración de El Escorial fue la que el príncipe heredero y sus seguidores efectuaron para destituir a Godoy y destronar a Carlos IV en favor de Fernando (VII).
- El papel de Napoleón en este episodio es muy importante, y se ve que su importancia va a ser mucho mayor en próximos episodios. De momento, para casi todos era como la figura que iba a solucionar los problemas de España, como si fuera El Salvador, porque si unos veían en él al héroe que iba a echar a Godoy y poner a Fernando VII; otros veían que si Napoleón iba a conquistar Portugal era para repartírselo con Italia, Francia y la España de Godoy; para la Iglesia, Napoléon iba a poner en vereda al pecador de Godoy, que estaba estropeando la moral; y para uno sólo, Napoléon iba a destituir a Carlos IV para poner a alguno de sus hermanos como rey de España. Pero esto queda para el próximo episodio …. (continuará).
Yo sigo sin leer a Galdós después de todos estos ánimos pero tengo ya dos libros en casa para ver si me animo pronto ;)
ResponderEliminarBesos.
LittleEmily:
EliminarBueno, pues ya estás en el camino, si te los has comprado .... ya dudaste en su día. Es una lectura fácil, por si te anima y te quita el susto del nombre, :D
A mi me encanta benito perez galdos! me encantaria leer este libro!
ResponderEliminarLiz:
EliminarYa te llegará el tiempo Liz, tenemos ¡una larga vida! :P (esperemos, jeje)
Está muy bien esto de leer a Galdós para ir repasando la historia de España, por su forma de escribir nos da una imagen muy buena de como era la vida de la época. Yo no he leído todos los episodios, solo algunos y me gustaron mucho. He leído otros libros de Galdós y todos tienen en común lo fácil y cómodo que se hacen al lector, realismo y costumbrismo que se realza en la forma de hacer hablar a los personajes.
ResponderEliminarMuy bien Icíar, me gusta que perseveres en esta iniciativa :D
Besicos !
Susana:
Eliminar¿Has visto como voy cumpliendo? jeje, poco a poco irán cayendo. Es verdad que es una lectura fácil, muy recomendables y más cuando se sabe poco de la hstoria de España como yo :D
Otro besico, ¡ala!
o sea que no se parece nada a la Jelinek ;) tons lo apunto jajaja
ResponderEliminarun beso,
Ale.
Bibliobulímica:
Eliminar¡Ah, no, no,no! Jajaja, no te puedes escapar, ¡no puedes fallar tu propio reto! Jajaja
Hoy sí que me das un respiro, porque con esta extensa obra no me atrevo.
ResponderEliminarTe deseo un buen fin de semana. Besos,
Offuscatio:
EliminarBueno, bueno, la vida es laaarga. Yo intentaré seguir tentándote con cada episodio :P
Voy a tener que leer algo de Galdós pronto, que me está entrando mono con vuestras reseñas. Y aún me quedan libros suyos por descubrir. Gran reseña!
ResponderEliminarBesotes!!!
Margarí:
EliminarEs verdad, aue prece que atacamos juntas, como a oleadas, dentro de poco iremos ya por el tercero :D
Quiero irme leyendo los Episodios poco a poco, de momento me voy haciendo con ellos jejej
ResponderEliminarBesotes
Shorby:
EliminarSi decides reengancharte, eresbien recibida, pues claro. En realidad son episodios que tienen principio y fin, lo cual permite leerlos sueltos, si se quiere.
Aún gustándome disfrute muchisimo más con Trafalgar, debe ser que me van más las batallitas que los folletines, jajajaja.
ResponderEliminarEva:
EliminarA mí también me gustó más Trafalgar, y en mi caso le achaco la culpa al Teatro (pero es que yo no soy mucho de teatro, salvo para leerlo). Aemás me habían dicho que el episodio menos divertido era Trafalgar, y claro, esoeraba algo mejor, y no, me resultaron más divertidos los personajes de Trafalgar.
Pero bueno, quiero continuar con la evolución de Gabrielillo y de España, que sin darte cuenta te va quedando con unad cuantas lecciones de historia :D
Pero sí, estoy contigo.
Yo también estoy con Eva: Trafalgar me gustó más y me quitó el miedo a Galdós, pero claro, esta trama es completamente distinta y una especie de introducción a lo que supongo vendrá después.
ResponderEliminarPero me sigue gustando Gabriel y su manera de contarnos los acontecimientos :D
Besos!
Isi:
EliminarSí, parece que coincidimos bastante. Y eso que a mí se me había quedado la idea por comentarios de que Trafalgar era de los peores episodios nacionales, así que espera que este fuese mejor, pero no, el teatro me gustó menos. Pero claro que continuaremos, merece la pena si dejamos fuera las comparaciones :D
A mí me gustó bastante más que Trafalgar. Esto del teatro y la farándula me encantó.
ResponderEliminarBesos,
Carmen,
Eliminar¿Sí? jajaja. Claro, eso sí, en este espisodio los personajes están en un sector muy creativo, jeje.
A mí también me gustó mucho "Trafalgar". Me gustaron los 46 --no con la misma intensidad--, pero Trafalgar me descubrió la obra y me entusiasmó leerlo.
ResponderEliminarDolmar:
EliminarPues eso es, hay que ir leyéndolos poco a poco. Nosotros llevanos de momento dos, y los dos están muy bien, aunque de momento también coincida que puestas a eleegir, va ganando Trafalgar, pero supongo que conforme continúe leyendo iran cambiando estas preferencias :D